La princesa Olga.

Análisis comparativo del comportamiento sexual, las diferencias de clases sociales  y los encantamientos.

La princesa era hija de Olaf, rey de las Paneslavias, de Servia, de Montenegro, y regente de todas las Transilvanias.

Vivía en un hermoso castillo, al pié de las montañas del Tirol.

Ella era alta, rubia y esbelta. Con cabellos de oro, y ojos azules. Sus pechos eran de nácar, y los labios de rubí.

Era tierna, dulce y virgen.

Esa tarde, ella paseaba por los extensos jardines del palacio. Pero sin salir nunca de ahí, pues su padre le había advertido:

" Una horrible bruja, existía cerca del lugar. Y con encantamientos, transformaba a las personas, en los mas extraños animales. "

Caminando a la vera del cristalino lago, que adornaba las praderas del castillo, observó la presencia de un pequeño sapo.

El animal mas horrible, que había visto.

Su primer impulso fue evitarlo. Pero como además de ser hermosa, tenía un tierno corazón. Lo cogió entre sus manos, se lo recostó en el pecho. Y antes de dejarlo ir, le dio un beso.

"  ! Pffaff ! "

El sapo se convirtió, en un apuesto  príncipe.

Vestía camisa de seda blanca, que cubría una musculatura de dios griego. Bufanda de rojo vino, que en el cuello se enredaba. Y ondulaba con el viento.

La espada de acero Toledano, con empuñadura de esmeraldas, pendía de la cintura.  Las mallas que vestía, traslucían la musculatura de sus piernas. ( Como las del bailarín del valet Bolshoi: Nicolai Serkvichov. )

Mirándola fijamente, con sus penetrantes ojos grises, el príncipe le dijo:

" Hermosa princesa: Yo soy el príncipe Sergei. Y una horrible bruja me encantó, manteniéndome hechizado durante cien años, como un espantoso sapo.

Y el hechizo solo podría ser roto, con el primer beso de amor, de una princesa, como tú.

Por ello, yo que conservo también, poderes mágicos. Te premiaré concediéndote tres deseos.

Pedid lo que deseáis, pero:  ! Cuidado, Oh, hermosa princesa !, No debeís por ningún motivo, repetir vuestros deseos. Pues si así lo hicieses, Quedareis encantada. "

Y la princesa pidió tres veces de lo mismo, y quedó encantada.

 ¿ No has notado que extraño comportamiento tiene Olguita ?---.  Le dice la reina, a su marido Olaf --

Todo el tiempo está junto al lago.  Se la pasa pescando sapos. Los toma en sus manos, los besa, y espera un rato.

Después dice " Chin ", y los aplasta con el pié.